CAPÍTULO DANIEL GETS MAD

El primer material audiovisual escogido tiene por nombre “Daniel gets Mad”, es un capítulo de la serie “Daniel Tiger Neighbourhood” dirigido a la audiencia de la población infantil, de los 0 a los 6 años aproximadamente. Es un recurso en un idioma extranjero, es decir, en inglés, para que desde edades tempranas vayan teniendo un ligero contacto con otras lenguas. Ha sido extraído y visualizado de YouTube, aquí plasmo el enlace para que podáis verlo: https://youtu.be/fPUT4M8AV_0?feature=shared.En este capítulo se trata la rabia y aporta ideas de como gestionarla de manera correcta para que tanto educadores como padres puedan acceder a él y utilizarlo con un fin educativo.

Los protagonistas de este capítulo son Daniel, un tigre, y su amigo, Prince Wednesday, un humano. En un primer momento, aparecen super ilusionados, ya que van a ir a la playa a nadar y hacer castillos de arena para divertirse. Sin embargo, cuando se disponen a ir, abren la puerta y ven que está lloviendo, ya no podrán salir a jugar. Vemos como se enfadan. Este sentimiento de enfado se ve representado gracias a la comunicación no verbal, los gestos y movimientos que muestran sus cuerpos, nos indican su frustración e ira ante esta situación adversa.

La madre de Daniel interviene y reconoce la validez de estar enfadado y tener rabia, pero enfatiza en la importancia de no dejar que ese sentimiento los domine. Introduce una canción en la que sugiere técnicas para cuando uno está enfadado, como respirar hondo y contar hasta cuatro para que esta emoción vaya disminuyendo de manera progresiva. El enfado no se pasa de un momento a otro, pero esta canción es un buen recurso para calmar esa rabia. Apreciamos como la canción funciona, resultando un recurso positivo, ya que Daniel y Prince Wednesday la cantan juntos y se relajan.

Una vez están más relajados, los personajes optan por buscar una alternativa creativa al problema, por qué todas las adversidades pueden tener una solución. Piensan en equipo y juntos deciden recrear una playa dentro de casa, buscando diferentes objetos por la habitación de Daniel, como un sol de papel y conchas, así como cogiendo un poco de arena de fuera. Esta solución nos muestra la importancia de reconocer el sentimiento de rabia y de encontrar maneras positivas de canalizar toda esa energía negativa.

Por último, vemos como se enfada la madre de Daniel al descubrir que había arena en el salón de la casa. Siguiendo los mismos pasos que había proporcionando a los niños, canta la canción y cuenta hasta cuatro logrando calmarse. Esta escena nos muestra como los adultos también experimentan problemas a la hora de gestionar emociones, es por ello que este recurso es de gran ayuda para las personas adultas.

En conjunto, este episodio proporciona una valiosa lección sobre la gestión de las emociones, al mismo tiempo que fomenta la creatividad y propone un recurso para gestionar la rabia.

Alba González Rajas.