En esta escena de Inside Out, los padres de Riley se encuentran preparando la comida para ella, en este caso es brócoli, cosa que no le gusta, por lo tanto, se ve como le produce rechazo y asco cuando sus padres proceden a darle de comer, sin embargo, en el momento que su padre le dice que se va a quedar sin postre si no come, podemos observar como su ira aparece y comienza a chillar.
En este caso el personaje que sufre la ira es Riley, una niña pequeña de unos 3 años máximo de edad, es normal en esta etapa de su infancia que los niños tengan rabietas como la que ha tenido ella, estas se pueden dar por muchos factores, en cambio, esta ha sido porque se le había regañado y se le ha dicho que como no cumpla con su obligación, que es comer, un premio (el postre) se le será arrebatado, por lo que es normal que eso a la niña no le haya gustado. Esta vez Riley muestra su rabia chillando a sus padres y gritando, es una niña muy expresiva por lo que se ve, ya que aparte de esa reacción está claro que la actitud de la cara cambia según ella lo muestra, sin embargo esta rabia no es una rabia que le dure mucho tiempo, es decir, es cambiante, ya que el padre sabe manejarla y comienza a jugar con ella al avioncito, una técnica que normalmente siempre se ha solido usar con los niños a la hora de comer, cuando estos no quieren, ya que así lo ven como un juego y es más fácil para los padres. Por lo tanto, en el momento que su padre realiza esta estrategia el rostro de la niña cambia inmediatamente y comienza a comer sin ningún tipo de rechazo hacía el brócoli.
También al ser la película de Inside Out, las emociones también tienen su propio personaje y son las que hacen que Riley actúe de determinadas maneras según a que situación se este enfrentando, por lo que dentro de la cabeza de Riley, se encuentran unos personajes que son las emociones, en este caso Asco aparece cuando ve el brócoli y por eso Riley reacciona con rechazo a él, e Ira aparece cuando escucha a su padre explicarle que si no come no habrá postre, y por eso Riley reacciona con una pequeña rabieta.
Elisa Petizco Martin